'

El uñero: Realidad o ficción?

Cuando la mayoría de las personas sufren un dolor asociado en mayor o menor medida a la uña, tienden a identificarlo como un “uñero”. Técnicamente, existen múltiples causas por las que podemos padecer dolores relacionados con la uña, pero no necesariamente todos son “uñeros” u onicocriptosis ungueal, nombre científico de esta conocida patología.

Sin embargo, la estadística demuestra que el “uñero” es una de las causas más comunes por la que tenemos molestias en los dedos de nuestros pies, por lo que su identificación y tratamiento correcto es fundamental para conseguir la solución a esta dolencia tan habitual.

¿Cómo saber si el dolor que tenemos en un dedo del pie es un “uñero? ¿Dónde debemos acudir en caso de tener un “uñero”? ¿Cuáles son las causas más comunes que pueden provocarlo? ¿Qué opciones existen para tratarlo?

Son muchas las causas que desencadenan onicocriptosis, por lo que debe ser un especialista el que diagnostique correctamente si se trata de un uñero. Las más comunes son: no cortar adecuadamente las uñas, un calzado inapropiado, actividades deportivas que impliquen impacto, golpes o roces continuados. Pero estas, a pesar de ser las más comúnmente conocidas no son las únicas, ya que existe un amplio abanico de factores que pueden provocar la aparición de un “uñero”. Por este motivo, debe ser un podólogo el que examine minuciosamente el caso y determine el tratamiento adecuado e individualizado en cada paciente.

Cuando algún dolor en el pie nos asalta, debemos acudir al podólogo, que son los especialistas en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades y afecciones del pie. La Unidad Integral del Pie (UIP) es una clínica constituida por un equipo multidisciplinar de profesionales que se dedican rigurosamente a procurar soluciones y tratamientos adecuados, siendo así un centro de referencia en el tratamiento del pie en las Islas Baleares.

Hay dos grandes opciones para tratar un “uñero”: el tratamiento conservador y el tratamiento quirúrgico. La primera consiste básicamente, en reeducar o reconducir la uña a partir de diferentes técnicas como por ejemplo la ortonixia, basada en la colocación de una guía metálica adaptada a la necesidad de la estructura de cada uña que, sin dolor, consigue el objetivo marcado. La quirúrgica o matricectomía parcial, aún sin ser una técnica agresiva, es algo más invasiva, pero determinados casos de onicocriptosis necesitan obligatoriamente de ésta para solucionar el problema.

– El “uñero” es por tanto, una realidad que mal diagnosticada y mal tratada puede convertir en ficción su cura.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *